0-1. Una Copa envenenada

Un importante banco de pruebas. Así catalogó la cita de este miércoles en el Nuevo Arcángel el técnico José Luis Oltra. La competición vital y que acoge todo el interés blanquiverde reside en la Liga y esta cita copera solo servía para preparar mejor los posteriores choques. El objetivo estaba claro: pasar a la siguiente ronda pese a que el formato no es para nada favorable a los clubes de Segunda División. En un ambiente algo tenso tras la segunda derrota consecutiva volvían los cordobesistas al estadio ribereño para afrontar el envite frente al Lugo y evitar que se repitieran las escenas finales que pudieron verse ante el Alcorcón. Ahora es cuando debía darse un golpe sobre la mesa para que la ilusión no pasase de largo a las primeras de cambio.

Falcón titular en portería, Fran Serrano y Abel a la zaga, Gálvez al medio y Caballero de mediapunta con De Tomás arriba

Muchos cambios en la convocatoria de los califales. Rafa Gálvez, Arturo, Fran Serrano y Abel Moreno eran las principales novedades con las que contaba Oltra. Otros hombres como Domingo Cisma (por precaución), Xisco Jiménez, Héctor Rodas, López Silva y Florin Andone (un largo viaje desde Rumanía privó al ariete de participar) se quedaron fuera de los dieciocho citados. De partida eligió el míster a Falcón para la portería. Dalmau recuperaba el lateral derecho de la defensa. Deivid y Fran Serrano serían los centrales y Abel Moreno debutaría en partido oficial como jugador del Córdoba en la siniestra. Doble pivote en el centro del campo para Víctor Pérez y Gálvez. Costado derecho con Pedro Ríos, izquierdo para Fidel y la mediapunta quedaría en el lugar de Carlos Caballero. La referencia ofensiva, Raúl de Tomás. Se prefirió no iniciar con dos atacantes y meter al madrileño como el más próximo al ariete cedido por el Real Madrid Castilla en una prueba de cara al futuro. Luis Milla por su parte sacó a José Juan en la meta. Pau Cendrós, Israel Puerto, Carlos Hernández y Manu en defensa. Por delante Seoane, Ferreiro, David López, Campillo y Molinero y un viejo conocido en la punta: Joselu.

Los locales salen mejor y el Lugo casi se marca en propia puerta

La magia que tenía la Copa por tierras cordobesas no quiso desaparecer tan fácilmente y el Arcángel respaldó a los suyos desde el pitido inicial. Esa animación motivó a los locales que tuvieron la primera ocasión antes de cumplirse el primer minuto. Buena acción de Caballero progresando por el centro del campo, asiste dentro del área para Fidel y el centro del onubense termina en saque de esquina y casi sorprende a José Juan tras golpear en un defensor. La historia del pasado fin de semana pudo empezar con un giro a favor de los intereses califales. Finalmente, la pelota se perdió por la línea de fondo. El más activo en el inicio fue Pedro Ríos por su banda y provocó los aplausos del respetable. En otro balón parado, Fran Serrano no pudo cabecear en condiciones y se perdió una nueva oportunidad. Prometedor cuanto menos el arranque.

Los lucenses poco a poco se metieron en la dinámica del choque y se hicieron con el control, eso sí, sn tener presencia arriba. Solo alguna subida aislada de Campillo por la izquierda que sostuvo en condiciones Fran Serrano. El Córdoba empezó a perderse con pases desde atrás en largo hacia Raúl de Tomás y tuvo un susto mayúsculo tras una cesión de Dalmau que estuvo a punto de costar caro. Intentaron quitarse esos instantes de nervios de encima los cordobesistas en una gran acción de Fidel que la puso al punto de penalti y allí apareció la referencia ofensiva De Tomás para mandar su testarazo a la derecha de José Juan.

Bajón de juego e imprecisiones por parte de los dos equipos

El constante cambio de posiciones entre Ferreiro y Campillo también daba sus frutos a la hora de sacar el esférico con garantías. Así progresaba Molinero en sus intentonas y probó con un tiro lejano que se perdió desviado. Igual destino obtuvo un chut de Fidel después de una buena acción colectiva de los andaluces. Pasado el ecuador de la primera mitad, el duelo copero parecía igualado y sin tiros reales entre palos. El cronómetro corría y resultaba cada vez más complicado ver jugadas consentido en ambas escuadras. La noche caía en Córdoba al mismo nivel que el ritmo del partido.

Y entre tantos errores y falta de concentración, Joselu se plantó solo aunque escorado ante Falcón y elevó en demasía la pelota por encima del larguero. Los primeros pitos aparecían en el estadio ribereño antes de que Raúl de Tomás intentase desde su campo sorprender a un adelantado José Juan. El portero del Lugo no se dejó batir y la grada le pedía más a los jugadores. Deseo que se convirtió en realidad con un pase desde la izquierda que remató De Tomás fuera por muy poco. Con muy poco se podía levantar el ánimo de la hinchada que solo quería remar en la misma dirección que el equipo si le daba motivo para ello. Pero el que sí logró que se vitorease su nombre fue Fidel. El onubense se anticipó a un pase de Dalmau por la banda, regateó en un palmo a todos los que le salieron y José Juan estuvo muy rápido para evitar el primero del choque.

El descanso llegó al dictaminarlo Pizarro Gómez y las últimas aproximaciones blanquiverdes debían motivar a un plantel que no había probado en exceso a José Juan. Precaución con los balones a la espalda de la defensa y los desajustes que se sucedían entre los centrales y el centro del campo.

Despropósito defensivo nada más empezar la segunda parte que cuesta el 0-1

El segundo acto se inició sin cambios en ninguno de los dos conjuntos. En ese aire descafeinado asaltaría el Lugo la banca con un nuevo error defensivo. Gálvez cedió atrás la pelota y Falcón tardó un mundo en salir a por el balón. Joselu se aprovechó del descontrol para regatear al gaditano y sellar el primero de la noche. El onubense no celebró el tanto por respeto a la que fue su afición y el silencio se apoderó del Reino blanquiverde por minutos. Y otro pase en largo para Joselu estuvo a punto de costar el segundo. En esta ocasión tiró desviado el atacante andaluz ante el nerviosismo de los presentes. Oltra movió el banquillo y quitó a Gálvez para meter a Arturo arriba junto a De Tomás. Necesitaba una reacción lo antes posible.

El empate lo tuvo precisamente el cartagenero nada más salir. El pase en profundidad lo bajó perfectamente e intentó batir por bajo en la salida a José Juan. Sin embargo, el guardameta adivinó las intenciones del 11 cordobesista y despejó con los pies. Después asustó nuevamente desde fuera del área Ferreiro antes de que Víctor Pérez y Carlos Caballero vieran las primeras amarillas del Córdoba. Poteriormente fue Pedro Ríos el que no supo dirigir a portería un buen servicio de Fidel. La grada se desesperaba cada vez más ante el juego muy pobre de los califales.

Víctor Pérez se lleva una monumental pitada y Abel no aguanta sobre el verde

La historia pudo ir a peor si Lemos hubiera aprovechado nada más salir un servicio con el que se quedó solo ante Falcón. Ahora sí, el de Cádiz la mandó a saque de esquina. No había forma de tener sentido en las acciones en ataque y la defensa temblaba con cualquier balón al espacio. Campillo se animaba también a probar desde la frontal a Falcón sin éxito. El que tendría que salir del campo lesionado sería Abel. El joven jugador del filial no pudo aguantar sobre el césped y Luso entró. Dalmau pasó a la izquierda y el aragonés al carril diestro.

Pero el que se llevó la peor parte fue Víctor Pérez. El manchego se retiró para que entrase Pineda y la soberana pitada que se llevó del Nuevo Arcángel augura un camino bastante desfavorable para el centrocampista en su etapa como blanquiverde. De nuevo, al igual que contra el Alcorcón, la grada se dedicó a mirar al palco y a pedir explicaciones y dimisiones ante lo que se estaba viendo en el campo. Mientras, De Tomás pedía penalti que no concedió el colegiado madrileño y a la contra Lemos chutó fuera.

El Lugo empezó a perder tiempo en la recta final y se vio muy poco juego en el Arcángel. Se vaciaba poco a poco el recinto deportivo ante la desesperación que estaban viviendo. Oltra gestualizaba pidiendo claridad a los suyos, algo que no iba a suceder ni queriendo. Para muestra, la acción que falló solo para empujar Pineda que acabó mansamente en las manos de José Juan. La Copa ha pasado de "molar" a convertirse en un veneno que prolonga la crisis abierta de resultados y juego del Córdoba en una semana que terminará en Zaragoza ante uno de los supuestos rivales directos que iban a tener los andaluces para luchar por ascender a Primera División.

FICHA TÉCNICA:

CÓRDOBA CF: Falcón, Dalmau, Deivid, Fran Serrano, Abel Moreno (Luso, 70'), Víctor Pérez (Pineda, 75'), Rafa Gálvez (Arturo, 52'), Pedro Ríos, Fidel, Caballero y De Tomás.

CD LUGO: José Juan, Pau Cendrós (De Coz, 68'), Israel, Hernández, Manu, Seoane, Ferreiro (Lemos, 63'), David López, Campillo, Molinero y Joselu (Carlos Pita, 76').

GOLES: 0-1, Joselu.

ÁRBITRO: Valentín Pizarro Gómez (comité madrileño) amonestó con cartulina amarilla a los locales Víctor Pérez, Carlos Caballero y al visitante Pau Cendrós.

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la segunda ronda de la Copa del Rey disputado en el Nuevo Arcángel de Córdoba ante unos 12.000 espectadores.