2-0. La vida va a peor

Decía una de las letras más conocidas de Julio Iglesias que "La vida sigue igual". Pues para el Córdoba va a peor. Sigue a siete puntos de la salvación pero resta una jornada menos para que la Primera División termine por apagarse por completo. Los cordobesistas aguantaron en la primera mitad el cero a cero y gozaron de una gran ocasión en las botas de Nabil Ghilas. Pero nada más empezar el segundo acto, Juanmi ponía el 1-0. Sin capacidad de reacción, Amrabat terminaba por rematar la contienda y dejar más cerca de Segunda a un conjunto sin ideas ni esperanzas.

Novedades en un equipo con la soga al cuello: Luso y Ekeng parten de inicio. Cartabia, suplente.

Miroslav Djukic sorprendía con algunas variantes importantes en el once que jugaría en el estadio de La Rosaleda. Saizar repetiría en portería como viene siendo habitual desde que le arrebatase el puesto a Juan Carlos frente al Valencia. Luso sería el lateral derecho en lugar de Campabadal. Pantic (tras su sanción) y Crespo repetían una de las parejas de zagueros más usada por el serbio. Fede Vico se ha ganado un hueco en el flanco izquierdo. El centro del campo estaría conformado por Zuculini, Krhin y Ekeng. Borja García, Bebé y Ghilas serían los hombres más ofensivos del Córdoba. La otra noticia estaba en la suplencia de Fede Cartabia. El argentino ha estado últimamente muy irregular y en nada se parece a ese jugador que inició la temporada.

Javi Gracia por su parte optaría por Kameni bajo palos, Rosales, Angeleri, Weligton y Boka (por Miguel Torres) en defensa, Camacho, Sergi Darder, Samuel, Ricardo Horta en la media y más adelantados Samu Castillejo y Juanmi. Los malacitanos necesitaban el triunfo para evitar que el Athletic Club redujera al final de la jornada la ventaja en ese séptimo puesto que puede valer posición de Europa League si el Barcelona derrota a los leones en la Copa del Rey.

Sin ocasiones de gol en el primer tramo del partido

El ambiente en la capital de la Costa del Sol antes de arrancar el encuentro era sensacional. Un gran número de aficionados llegados desde Córdoba animaban en la grada y confiaban en lo que ya se ha calificado como "milagro". González González dio inicio al duelo andaluz y los visitantes (hoy de negro) demostraron que se jugaban la vida. Dominio claro de la pelota en los primeros cinco minutos y un intento de disparo de Bebé desde fuera del área atestiguaban la necesidad imperiosa cordobesa. El Málaga solo inquietó con una falta desde la derecha que Saizar atajó en dos tiempos.

Antes de llegar al cuarto de hora ya se hizo dueño y señor del encuentro el conjunto malacitano. De hecho, Juanmi enganchó un centro procedente de la parte derecha al que el meta vasco del Córdoba respondió sin problemas. Los de Gracia manejaban la pelota a su antojo y abrían las bandas a la perfección. Rosales por la diestra y Boka por la siniesta subían sin dudar ante una férrea defensa blanquiverde que imposibilitaba ocasiones de peligro.

Boka la manda al palo y en la contra Ghilas no pudo batir a Kameni

El Málaga empezó a inquietar más el arco de Saizar nada más pasar el ecuador del primer acto. Primero fue Ricardo Horta con un chut desde la frontal y posteriormente con un zurdazo de Rosales que se perdió por encima del larguero. Y como ya indicamos con anterioridad, los laterales del equipo blanquiazul se convertían en auténticos extremos. Así nació la mejor hasta ese instante con una buena conducción de Boka que terminó en un remate al palo del propio jugador. En la contra, Bebé sorprendió por la derecha, la sirvió a la perfección a Ghilas y el delantero falló ante Kameni. La respuesta del portero camerunés evitó que el Córdoba pudiera adelantarse en el marcador, pero también es cierto que la madera privó a los locales poner el primero de la tarde.

González González señaló más tarde un libre indirecto dentro del área cordobesista porque Krhin retuvo la pelota de manera ilegal. En esa acción, Boka asistió a Samu que de cabeza no acertó entre los tres palos. Eso sí, el centrocampista estaba completamente solo de marca en una oportunidad de las que no se deben fallar. En otro despropósito de Ekeng al no conectar un disparo estuvo el Málaga a punto de marcar. La contra fue rápida, pero el centro desde la izquierda lo cortó Saizar antes de que Juanmi pudiera empujar el balón al fondo de las mallas.

Inoperancia ofensiva de los hombres de Djukic que no aprovecharon su clara ocasión

Antes del descanso, Sergi Darder se inventó un tiro con el interior que buscaba la escuadra más lejana de Saizar. El esférico acabó perdiéndose en una nueva ocasión para los malaguistas. Los de Djukic se iban a los vestuarios con un empate que de poco les valía si querían luchar una jornada más por el objetivo de la permanencia y con la sensación de que el Málaga podía marcar en cualquier momento debido a su juego vertical y ofensivo. Si a eso le sumas que no eres capaz de marcar cuando la tienes, todo es más complicado.

Florin entra por Ekeng para ir a por el partido pero el Málaga golpea primero

Djukic sacó al campo a Florin por Ekeng porque era consciente de que el empate no le servía de mucho. Sin embargo, el Málaga salió a por todas y así nació el primero del partido. Samu Castillejo se inventó un gran pase por encima de la defensa para Juanmi que, en posición de fuera de juego, metió la puntera ante la salida de Saizar y alojó la pelota en la red. La única forma de superar a la zaga era con un toque de calidad que Castillejo dispuso de manera brillante y el Córdoba tenía que remar ante viento y marea (como habitualmente). Lo peor es que los locales se estaban gustando y podrían aprovechar cualquier laguna detrás para aumentar su ventaja, cosa que casi sucede con un disparo de Darder que paró Saizar.

El Córdoba salió un poco de la cueva con un centro desde la derecha de Bebé al que no accedieron Ghilas y Florin al remate. El pundonor del joven rumano volvía a dejarse notar y apretaba todo lo que podía la salida de balón malagueña. Javi Gracia decidió entonces mover el banquillo y sacó del campo a Samu Castillejo para meter a Luis Alberto.

Weligton salva bajo palos el empate y Amrabat sentencia

Y la mala suerte volvió a aparecer en el camino cordobés. La serie de pases entre Florin y Borja García termina con una asistencia del madrileño a Krhin que chutó y Weligton salvó el empate bajo palos. A renglón seguido, Kameni cortó un centro desde la banda que iba dirigido a Andone. Djukic vio que Fede Vico estaba tocado y prefirió meter a Fausto Rossi en el terreno de juego. Crespo se iría a la izquierda, Krhin a la zaga con Pantic y Rossi su posición habitual en el centro del campo. El tercer cambio no tardó en producirse y fue hombre por hombre: Campabadal por Luso. En el Málaga entró Amrabat por Juanmi para terminar de sentenciar el choque en alguna ocasión.

Los minutos pasaban rápidamente sin que el Córdoba visitase las inmediaciones de Kameni. Ricardo Horta sacó un derechazo que se estrelló en el palo. El que ya mataría definitivamente el derbi sería Amrabat. Buena conducción del internacional marroquí que termina con un chut al palo defendido por Saizar que supuso el segundo. Impotencia, desesperación y rabia de los jugadores de Djukic que estuvieron a nada de recibir el tercero segundos después, pero Luis Alberto falló solo.

El Córdoba se queda a siete puntos de la salvación y con una jornada menos para conseguir remontar el vuelo. Tristemente parece que solo hay que esperar a la definitiva "hora de la muerte" de un equipo que tiene pie y medio en Segunda División.

FICHA TÉCNICA:

MÁLAGA CF: Kameni, Rosales, Angeleri, Weligton, Boka, Camacho, Sergi Darder, Samuel (Recio, 81'), Ricardo Horta, Samu Castillejo (Luis Alberto, 59') y Juanmi (Amrabat, 72').

CÓRDOBA CF: Saizar, Luso (Campabadal, 72'), Pantic, Crespo, Fede Vico (Rossi, 66'), Zuculini, Krhin, Ekeng (Florin Andone, 46'), Borja García, Bebé y Ghilas.

ÁRBITRO: José Luis González González (comité castellano-leonés) amonestó con cartulina amarilla a los visitantes Florin Andone y Bebé.

GOLES: 1-0, Juanmi. 2-0, Amrabat.

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la 27ª jornada de la Liga BBVA disputado en el Estadio de La Rosaleda de Málaga ante más de 20.000 espectadores. Presencia de aficionados blanquiverdes en las gradas.