2-0. Viene para quedarse

25 de agosto de 2014 | | Nacho Serrano

El Córdoba, que fue muy superior en la segunda mitad, cayó ante los goles de Benzemá y Cristiano Ronaldo. Fidel y Fede dinamizaron el duelo en el segundo acto.

La primera parte arranca con igualdad. El Real Madrid, con todo su potencial ofensivo sobre el césped, empezó a dominar la pelota, pero sin encontrar los espacios que tapaba un Córdoba muy concienciado en la tarea. Incluso, Albert Ferrer apostó por darle la titularidad a Pinillos en el interior izquierdo, con la clara intención de de mitigar el notable poder ofensivo del conjunto blanco. Y la idea, por momentos, resultó efectiva, ya que los de Ancelotti no encontraban la fórmula para derribar el planteamiento del técnico catalán. Solo Bale, en los inicios del duelo, probó fortuna a balón parado, pero el intento se le marchó desviado.

 

El conjunto blanquiverde, arropado por más de cinco mil seguidores llegados desde la ciudad califal, lo intentaba en base al juego directo sobre Havenaar, muy activo en el primer tiempo ante Ramos y Pepe. Incluso, tuvo una buena acción en el minuto seis, pero su disparo con la derecha se marchó desviado del palo izquierdo de la portería defendida por Iker Casillas. Sería el primer uy del Córdoba, que aguantó por momentos al caudal ofensivo blanco, que contaba, en la tarde de hoy, con el recuperado Ronaldo. Precisamente, el portugués tuvo una buena oportunidad en una jugada ensayada, pero Juan Carlos respondió bien al aviso del vigente balón de oro.

 
El Madrid aprieta y encuentra el gol
 

Desde entonces, el Real Madrid comenzó a achuchar de forma clara, metiendo al cuadro blanquiverde en su área a base de forzar saques de esquinas. El Córdoba, algo fatigado en el rush fina del primer acto, empezaba a pagarlo, pues el conjunto blanco empezó a mover la pelota cerca de las inmediaciones del meta alcarreño, que tuvo que intervenir de forma decisiva ante un buen disparo desde la frontal del alemán, Toni Kroos.

 

Precisamente el campeón del mundo sería el encargado, minutos después, de botar de forma magistral un córner desde el costado derecho que fue a parar a la cabeza de Benzemá. En este caso, Juan Carlos poco pudo hacer y el Bernabéu veía así el primer gol en Liga del nuevo año. Desde entonces, el reloj apenas corría para los de Albert Ferrer, que veían una y otra vez rondando su área, aunque sin ocasiones de excesivo peligro.

 
Havenaar, a punto empatar
 

De este modo, antes del descanso y aunque el Córdoba apenas tenía la pelota, los de Albert Ferrer encontraron varias situaciones de peligro desde los costados. Gunino, desde la derecha, lo intentó en dos ocasiones, si bien no llegó a encontrar al japonés Havenaar para conectar alguna opción real para igualar el choque. Sí lo haría al filo del descanso el mismo protagonista, que envió cerca de palo izquierdo un magistral servicio desde la esquina de Fausto Rossi. Con ese regusto dulce y toda la segunda parte por delante, el Córdoba llegaba a vestuarios.

 
Cartabia, al campo tras la reanudación
 

Con esa buena sensación que poder comentar en el intermedio, Albert Ferrer intentó voltear la situación. Y lo hizo desde el inicio, retirando del terreno de juego a Pinillos y dando entrada en su lugar a un Fede Cartabia que, desde que echó a rodar la pelota, demostró desde su salida por qué es uno de los hombres sobre el que se sustenta el objetivo blanquiverde de la salvación. Todo lo hacía bien y con criterio, ofreciendo soluciones desde la derecha en cada pelota con la que conectaba. El Real Madrid, por lo tanto, estaba a merced del fútbol que proponían los de Albert Ferrer, aunque este no fuera un hecho que importara en demasía a un conjunto basado, principalmente, en su fortaleza al contragolpe.

 

Así, y bajo los acordes incesantes de un sí, se puede convincente y lleno de fe de la hinchada cordobesista en el Bernabéu, el conjunto blanquiverde empezó a encontrar que el empate no era un sueño irrealizable, por lo que se volcó ante la meta de Casillas, tomó las riendas del partido y solo las intervenciones del guardameta madrileño (a disparo de Matos) o el infortunio de Pantic a balón parado (tuvo dos buenas opciones en esta suerte), impidieron que el resultado fuese mucho mejor para los intereses del conjunto califal.

 
Gol anulado a Xisco
 

Sin embargo, el runrún del Bernabéu con los suyos sería más evidente minutos más tarde, cuando Fidel Chaves y Xisco, salidos en la segunda parte, fabricaron la igualada, aunque esta fuera invalidada ante la posición antirreglamentaria del de Santa Ponça, que solo tuvo que empujar el rechace que le llegaba de Iker Casillas. El éxtasis llegó pero, desafortunadamente, solo duró unos segundos.

 

A partir de entonces, Ancelotti reaccionó y dio entrada a Carvajal e Isco para cambiarle el aire a un equipo que se encontró, por momentos, a merced de lo que proponía un Córdoba que fue mejor durante la segunda parte. Tanto temía el italiano por el resultado que se vio obligado a cerrar el duelo dando entrada a Sami Khedira en lugar de Benzema, lo que provocó los pitos en Chamartín, si bien es cierto que, desde el ingreso del internacional alemán, los hombres de ataque cordobesistas fluyeron menos en el tramo final, aunque forzaron situaciones de peligro en varios saques de esquina que ponían de los nervios, una y otra vez, a la parroquia local.

 

De ahí al final, el guión estaba escrito. El Córdoba buscaba el empate hasta donde las fuerzas le permitían, mientras el Madrid, que mejoró con la entrada Isco y Carvajal, apuraba el tiempo esperando un contragolpe con el que dar carpetazo al duelo, algo que no consiguió hasta el minuto noventa, cuando Cristiano Ronaldo batía desde lejos a Juan Carlos para llevar la tranquilidad total a un Bernabéu que, durante la segunda parte, temió por los tres puntos.

 

De este modo, y con un disparo lejano de Fidel que a punto estuvo de significar el 2-1, el Córdoba arranca con fe y demostrando al mundo que viene para quedarse. Ahora queda refrendarlo en una Liga, la suya, que dará comienzo el sábado que viene en El Arcángel.

 
FICHA TÉCNICA:
 

REAL MADRID: Iker Casillas; Arbeloa (Carvajal, m.72), Pepe, Ramos, Marcelo; Kroos, Modric, James Rodríguez (Isco, m.72); Cristiano, Bale y Benzemá (Khedira, m.75)

 

CÓRDOBA CF: Juan Carlos; Gunino, Íñigo López, Pantic, Crespo; Garai, Fausto Rossi; Pinillos (Fede Cartabia, m.46), López Silva, Ryder Matos (Fidel, m.61); Havenaar (Xisco Jiménez, m.66)

 

ÁRBITRO: Gil Manzano (colegio extremeño), amonestó a Dani Pinillos y López Garai, en el Córdoba, haciendo lo propio con Benzemá, en el Real Madrid

 
GOLES: 1-0, Benzemá (m.30); 2-0, Cristiano Ronaldo (m.90)
 

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la primera jornada del Campeonato Nacional de Liga en Primera División, disputado en el Santiago Bernabéu ante unos 80.000 espectadores (alrededor de 5.000 llegados desde Córdoba)