La portería, un lugar intocable

29 de julio de 2014 | | Nacho Serrano

El club blanquiverde ha dado altas en todas sus líneas salvo bajo palos, donde Juan Carlos, Saizar y Razak seguirán como integrantes. Por otro lado, Gunino ya está en Marbella

El Córdoba sigue inmerso en su planificación deportiva de cara al nuevo curso en Primera División para encontrar los cuatro fichajes con los que Albert Ferrer daría por concluida la plantilla del regreso a la máxima categoría. A la ciudad califal han llegado Deivid, Ekeng, Fede Cartabia, Fidel, Havenaar y José Carlos, además de los regresos de dos cedidos como Gunino y López Garai.

 
La portería no se toca
 

Sin embargo, si hay una demarcación que no ha sufrido y, parece, no va a tener modificaciones, esa es la primera línea. Porque, aunque aún queda más de un mes para el cierre del mercado, los tres porteros parecen, a día de hoy, estar más claros que nunca. Así, Juan Carlos, Saizar y Razak continuarán como los integrantes de una portería que ya contaba con los mismos efectivos en la división de plata.

 

Y eso que, durante unos días, se valoró la opción de que algunos de ellos pudiera abandonar la disciplina del club califal (Saizar estuvo a un paso de marcharse al Alavés), si bien la contratación de algún jugador para ese puesto no ha entrado en los planes en ningún momento. De hecho, al equipo blanquiverde se le ofreció la posibilidad de contar con Javi Varas, futbolista que no entra en los planes de Unai Emery para este año en el Sánchez Pizjuán, si bien fue desestimada por el club, ofreciendo que no se buscaban efectivos para esa zona.

 

Por todo ello, y teniendo los tres hombres muy claros para ese lugar, Juan Carlos no puede sino congratularse de “la confianza que se ha transmitido al no haber fichajes en nuestra demarcación”, aunque también sabe que el mercado es largo y el fútbol se mueve a un ritmo vertiginoso. “Aquí estamos para trabajar y ayudar y, si alguien viene para eso, será bienvenido”, si bien no se preocupa por qué pueda pasar, ya que “vivo el día a día”, desvelando que “me han transmitido que están contentos con mi trabajo y lo demás se me escapa”, dijo.

 

De cara a los que serán sus rivales por el puesto, el alcarreño quiso incidir en la palabra “ilusión” para definir a sus compañeros, por lo que huye de cualquier favoritismo para empezar de titular este año por haber concluido el curso pasado jugando. “Eso tiene que decidirlo el entrenador, pero no creo que haya cierta ventaja. Aquí tratamos de ayudar y, si opta por mí, tratar de sumar. No sé qué decidirán al final desde la Dirección Deportiva, pero tampoco me importa. Solo espero que el equipo funcione, que estemos todos a una y que se consigan resultados”, apostilló.

 
Gunino, en el stage
 

Por otro lado, la mañana dejó en el Córdoba un quebradero de cabeza menos para Albert Ferrer. Y es que el charrúa, a pesar de haber sido anunciado como refuerzo la semana pasada, todavía no había podido regresar de su Uruguay natal, de ahí que ese hecho supusiera un problema para el catalán, que no había podido empezar a trabajar todavía con el lateral, teniendo que tirar durante los noventa minutos ante el Marbella de un jugador descartado y que saldrá cedido a un equipo de Segunda División como Campabadal.

 

De este modo, y con el defensor dispuesto para empezar a trabajar con el resto de sus compañeros, está por ver si su estado físico es óptimo como para empezar a disputar minutos de juego en el próximo compromiso ante el Cádiz o, si por el contrario, la puesta a punto se ralentizará hasta completarse una vez que el conjunto blanquiverde vuelva de regreso para continuar con su pretemporada.