El Deportivo quiere olvidar ante el Camoens su última derrota

Nueva prueba de fuego para el Deportivo Córdoba, que este sábado se desplaza hasta Ceuta para medirse a partir de las 19:00 al Camoens, un rival que en la primera vuelta venció en Vista Alegre por un contundente 1-9, pero al que se le suele dar bien al conjunto cajista a domicilio, como prueba el hecho de que no haya perdido en sus tres visitas a la ciudad norteafricana (0-2, 1-9 y 1-1).

El conjunto blanquiverde acude a esta cita tras la derrota sufrida la pasada jornada ante el Comgeceu (3-5), en lo que Salvador Chía describe como "un partido raro en el que no salimos como deberíamos ante un rival directo por la permanencia y a pesar de haberlas tenido encerradas durante gran parte del primer tiempo luego concedimos tres goles en tres acciones que no supimos cortar y que nos hizo ir a remolque durante el resto de la primera parte; salimos en la segunda mitad a darlo todo después de la charla técnica, a darle la vuelta a la situación y más o menos lo conseguimos, pero nos volvió a pasar que en unos minutos de desconexión volvimos a conceder dos regalos y eso impidió que culminásemos la remontada, y el poder abandonar los puestos de descenso dejando atrás a un rival directo. Se aprieta todo bastante más, pero mantenemos la misma distancia y seguimos dependiendo de nosotras".

El técnico estepeño reconoce el mazazo psicológico que supuso el traspiés del fin de semana pasado, ya que "este último resultado, después de haber conseguido la victoria anterior frente al filial del Alcantarilla, vuelve a sentar como un jarro de agua fría... Hemos hablado en las sesiones de entrenamiento y hemos intentado ver que los fallos son nuestros, que somos nosotras las que tenemos que poner de nuestra parte para que no se vuelvan a repetir y hacer que la línea positiva sea una tónica; no es que nos haya superado el equipo contrario ni que haya sido mejor, pero por la ansiedad o lo que sea no fuimos de sacar el juego de la jornada previa y volvimos a cometer los errores que cometimos anteriormente".

En cuanto a la actividad durante estos días, Salvador Chía asegura que "la semana de trabajo ha ido bien, aunque seguimos teniendo a mucha gente entre algodones que nos imposibilita el meter la intensidad necesaria en las sesiones; pero a pesar de eso, gracias a las chicas que vienen desde abajo apretando y que nos ayudan hemos conseguido entrenar bien, hemos intentado corregir los errores y también tratar de meter a esas jugadoras en la dinámica de un equipo de Segunda división, y con ellas estoy muy contento porque están trabajando bastante bien, las veo muy motivadas y muy por la labor de ayudar al primer equipo y la muestra está en los pasos que están dando en los partidos, por ejemplo con María Calañas y su tercera titularidad consecutiva, con María Pedrajas que también suma mucho, Lidia apretando ahí... y en eso nos estamos centrando, en hacer que esas jugadoras den el saltito adelante, necesario para que nos puedan ayudar en el tramo final de la temporada".

Y sobre el encuentro ante el Camoens, el entrenador deportivista espera "un partido difícil donde estaremos condicionados nuevamente por las bajas y en el que iremos a plantarle cara a uno de los equipos que a priori era, por presupuesto, candidato a estar más arriba, pero que no está teniendo la regularidad necesaria, lo que intentaremos aprovechar para poder arañar algo positivo, y si son los tres puntos, mejor que mejor. Es una situación complicada, por lo que supone el viaje a Ceuta, el traslado en barco, el tiempo tampoco va a acompañar... pero pese a ello, vamos con la motivación y con las ganas de sumar una victoria, de demostrar que la última derrota fue un resbalón y que nuestra línea es positiva para salir de los puestos de descenso cuanto antes".