Antiviolencia multa a aficionados por el entrenamiento a puerta abierta

El entrenamiento del Córdoba a puerta abierta después de la derrota frente al Granada de mediados de mayo vuelve a recuperar su lugar en la actualidad. Y es que, como recordarán, varios aficionados increparon al equipo de José Antonio Romero durante toda la sesión preparatoria y no permitieron durante unos minutos salir al autobús de la Ciudad Deportiva. Las imágenes de lo acontecido se mostraron en diversas cadenas nacionales y la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) decidió denunciar ante la Comisión Antiviolencia lo sucedido. La propuesta: multa de 2.500 euros y prohibición durante tres meses imposibilitando el acceso a cualquier recinto deportivo a cuatro de ellos.

Se trató en aquel momento de una decisión del club que no tenía mucho sentido. Hasta ese día (y todos los posteriores a la fecha señalada) se hacían los entrenos a puerta cerrada. Sin embargo, se optó por dejar asistir a público a las instalaciones una vez el conjunto blanquiverde había consumado su descenso a Segunda División y solo hizo acto de presencia en Los Cármenes con un juego que dejó bastante que desear. En ese derbi, los locales se jugaban la vida y salieron a por todas desde el principio. Si a eso le sumamos las expulsiones de Íñigo López y Fede Cartabia y un absurdo y claro penalti de Pantic, la misión fue más que posible para los nazaríes que se impusieron sin ningún tipo de apuro.

Abel se despidió ayer y fue un protagonista involuntario de la escena en la ciudad deportiva

Abel Gómez, quien aprovechó la jornada de ayer para despedirse de forma oficial con un escrito muy sentido relatando su paso por el Córdoba, se vio también en el ojo del huracán durante esos días al no bajar del autobús para conversar con los allí presentes. El que fuera capitán cordobesista declaró que estaba en la parte trasera del vehículo y que no escuchó la petición. Además, añadió que estaba dispuesto a charlar con quien quisiera para dar las explicaciones necesarias. Se va un hombre elegante y que expuso sin mordazas lo que le pareció la campaña en Primera División desde la pretemporada.

No es la primera vez que esta Comisión actúa ante casos relacionados con el Córdoba CF. En el mes de abril, varios abonados fueron multados con 150 euros por utilizar la red social Twitter para insultar a miembros de la directiva y de la plantilla califal. La entidad también les retiró el acceso y pidió mesura y tranquilidad a la hinchada. Tiempos difíciles los que se han vivido por tierras cordobesas en los que la polémica ha estado más presente que el orgullo o la alegría.