42 años entre Fermín y Fede

31 de agosto de 2014 | | Nacho Serrano

El argentino anotó el primer tanto del Córdoba en la máxima categoría tras más de cuatro décadas de ausencia, sustituyendo así al centrocampista madrileño

De Fermín a Fede. O, lo que es lo mismo, de la jornada 33 en el año 1972 a la segunda del 2014. Cuarenta y dos años en total han tenido que pasar entre el mítico centrocampista blanquiverde y otro que va camino de convertirse en todo un referente para la grada de El Arcángel para tener un nexo común entre la despedida y la bienvenida a la máxima categoría: el gol.

 

Y es que Fermín, que será recordado para siempre por hacer el tanto que privó al FC Barcelona del título de Liga, ostentaba hasta el día de ayer el registro como último goleador blanquiverde en Primera División. “Para ganar este partido no hace falta bajarnos del autobús”, llegó a acuñar Charlie Rexach, quien fuera, con el tiempo, primer entrenador del club azulgrana. La jugada salió rana y, como ya es historia conocida del fútbol español, el Real Madrid terminó, gracias a aquel triunfo cordobesista, cosechando un nuevo título de Liga a su palmarés.

 
Fede toma el relevo
 

Así, y aunque estuvo cerca en el Bernabéu (Xisco llegó a marcar, aunque en posición ilegal), no fue hasta el encuentro frente al Celta cuando el Cordobesismo volviera a asistir a la celebración de un tanto como equipo de la máxima categoría. Lo hizo un argentino, también centrocampista como Fermín, cinco minutos más tarde después de que este anotara aquel recordado penalti al conjunto culé. En el minuto 60, y después de una jugada llena de fe de Fausto Rossi, un rechace caía en pies de Fede, que no se lo pensaba para, sin que mediara control, batir de tiro ajustado a Sergio.

 

El Arcángel estalló e incluso vio de cerca la victoria, pero finalmente se quedó en un punto que permite sumar a los de Albert Ferrer y, a expensas de lo que acontezca en la jornada de hoy, salir de la zona de descenso en la que estuvo inmerso tras caer, como estaba previsto, en el Santiago Bernabéu. Ahora, desde todos los rincones del Cordobesismo, la idea está clara: que el de Fede no tenga que ser recordado durante tantos años como el de Fermín. Sería la mejor de las señales.