No se puede catalogar de buena la temporada en la Andaluza Infantil. El simple hecho de haber perdido la categoría uno de los representantes cordobeses de la misma, como le ha ocurrido al Deportivo Córdoba, es motivo suficiente como para no darle ese calificativo. Sin embargo, esto no debe empañar la buena campaña realizada por el Séneca, ni tampoco la que ha protagonizado el Córdoba. Los rojinegros, aunque a mucha distancia del Sevilla y el Betis, campeón y subcampeón respectivamente de la categoría, ha logrado una tercera posición en la clasificación que refleja su buen hacer, que le ha llevado a ser el mejor conjunto cordobés de la categoría. Mientras tanto el Córdoba, que se movió al principio de la campaña por la zona más alta de la tabla, acabó finalmente en la quinta plaza, por detrás del Séneca y el Cádiz. Más incertidumbre creó el Don Bosco, que tuvo que esperar a los últimos compases ligueros para certificar la permanencia. El que no la pudo conseguir fue el Deportivo Córdoba, que ha cerrado una pésima campaña en el farolillo rojo de la tabla y en la que sólo ha logrado, al igual que el Xerez, tres triunfos.
Pero la representación cordobesa para la campaña 14-15 quedará de nuevo en cuatro equipos, pues al Séneca, el Córdoba y el Don Bosco se les unirá el Atlético Cordobés, una de las revelaciones de la Primera Provincial Infantil, tras proclamarse campeón en una competición en la que Los Califas, que finalmente fueron subcampeones, el Salvador Allende y el Lucena, conformaron un póker de equipos que siempre se mantuvieron en la zona alta de la clasificación peleando por el título liguero prácticamente hasta el final. También muy animada y emocionante estuvo la zona de abajo de la tabla, pues las normas dictaban el dejar un grupo de dieciséis equipos, con un mínimo de cuatro descensos, por lo que la presión de los equipos por alejarse de la zona de peligro ha sido tremenda. Finalmente fueron cinco los equipos que perdieron la categoría. Tres se quedaron descolgados desde el inicio de la competición, el Parque Cruz Conde, El Higuerón y el Villanueva, por lo que la lucha final por evitar las otras dos plazas se centró principalmente entre el Palma del Río, el Cabra, la Carlota, el Pozoblanco, el Figueroa y los dos que acabaron acompañando a los tres mencionados, el Almodóvar y el Don Bosco.
En Segunda Provincial, no tardaron muchas jornadas en escaparse cuatro conjuntos, el Aguilarense, el Rute, el Prieguense y el Posadas, que pugnaron hasta el final de la competición no sólo por el título liguero, sino por las tres plazas que daban opción a militar la próxima temporada en Primera. Todo quedó resuelto en la penúltima jornada liguera, en la que ya se proclamó campeón el Aguilarense a pesar de su derrota postrera en Posadas y del triunfo final del Rute frente al Fuente Palmera, en una última jornada en la que el Prieguense descansaba pero que se había igualmente asegurado la tercera plaza de la clasificación y por consiguiente el ascenso al superar en el goal average particular a un Posadas al que había derrotado en los dos envites ligueros. Por delante, el Aguilarense finalizaba con un solo punto de ventaja sobre el subcampeón, el Rute, logrando el salto de categoría junto a los de Priego. La lucha por abajo también fue importante. Se quedó descolgado desde el inicio el Villaviciosa y posteriormente el Fuente Obejuna, el Villarrubia y el Palomera Naranjo. Pero las plazas de descenso aumentaron hasta siete para dejar un grupo de 16 y a la última jornada ya llegó descendido el Fuente Palmera. Junto a ellos, sentenciaron igualmente su descenso el Bujalance y el Castro del Río, salvándose el Stadium.
Cuatro plazas de ascenso en los tres priemros grupos de Tercera, en el cuarto no estaba estipulado en las normas, además de una cuarta para el mejor segundo de estos grupos. En el primero el título y el ascenso fue para el Guadalquivir, en apretada lucha con el Fray Albino, que finalmente se quedó a tan solo dos puntos del campeón. En el grupo segundo, el título se lo adjudicó el Peñarroya, que mantuvo una cerrada lucha con el Villafranca e incluso el Baenense. Finalmente, el subcampeonato de los villafranqueños le vale igualmente para conseguir el ascenso como mejor segundo de los tres grupos merced a su mejor promedio respecto a los demás subcampeones. Y en el tercero, el más reñido de los cuatro grupos, el campeonato y el ascenso se lo llevó La Rambla. Por detrás, el subcampeonato se lo adjudicó el Montalbeño gracias al goal average particular con el Lucena, con el que finalizó empatado a puntos. Hasta el final, en este tercer grupo, el Egabrense y el Palma del Río, lucharon enconadamente por una de las plazas de privilegio. Y en el grupo IV, el Viso dominó con claridad por delante del Pozoblanco y el Villanueva del Duque, finalizando la competición sin perder un solo encuentro y cediendo sólo dos empates.
Magnífico el papel realizado por la selección provincial cordobesa en el Campeonato de Andalucía. El combinado al que retornaba como técnico Carmelo Salas, logró el subcampeonato andaluz después de caer de forma apretada en la final frente a Sevilla (1-2). Para llegar al partido decisivo los cordobeses empataron en sus dos primeros encuentros de la fase clasificatoria frente a Cádiz (2-2) y Almería (3-3), y derrotaron a Huelva (1-5), logrando el triunfo más abultado del grupo y la consiguiente clasificación para la lucha por el cetro andaluz.