Ya están los otros 21

El Córdoba ya conoce los 21 destinos que deberá visitar durante la temporada que comenzará en agosto. Tanto Albacete como Barcelona B –los manchegos con muchísimo sufrimiento- hicieron buenos los resultados conseguidos en Mestalla y El Sardinero y, en consecuencia, se convirtieron en los dos últimos equipos que se ganaron su billete de Plata para la 17-18. Se dio la circunstancia de que subieron los cuatro campeones de grupo de Segunda B, siendo la primera vez que ello sucede desde la nueva configuración de los play-off de ascenso.

La presencia de equipos históricos con la obligación ineludible de subir convivirá con el hambre de algún que otro advenedizo con mucho dinero para gastar. Distribuyendo a los equipos por regiones, Andalucía gana por goleada. Cinco representantes –junto al Córdoba, el Granada, Almería, Sevilla Atlético y Cádiz- que permitirán a los aficionados blanquiverdes vivir bonitos duelos ante sus vecinos. Siguiendo el mapa hacia el este, la desaparición de UCAM en la comunidad Murcia la ha paliado el surgimiento del extraño Lorca F.C. y, de paso, La Mancha recupera un representante con el ascenso del Albacete. La comunidad valenciana pierde sus dos representantes de una tacada.

En Madrid seguirán Rayo y Alcorcón –el Getafe subió- mientras que a Castilla y León la representarán tres equipos: Numancia, Valladolid y el recién ascendido –después de muchos lustros- Cultural y Deportiva Leonesa.

En Asturias revivirán el espectacular derbi Sporting-Oviedo quince años después y en Galicia seguirá como único representante el C.D. Lugo. También será un bueno duelo el que mida a Zaragoza y Osasuna. El Huesca, por su parte, tratará de volver a ser el primer equipo aragonés en la tabla. Catalunya conservará sus tres representantes –Nàstic, Reus y el filial culé- y el Tenerife será –tras el bajonazo del Mallorca- el único representante insular de la categoría.

Una Segunda atractiva y a la que todavía le quedan dos meses para que la pelota empiece a rodar en serio. Dos meses de arduo trabajo contra el reloj en las secretarías técnicas.