Un punto que sabe a gloria en un campo muy difícil

El nombre propio antes de iniciarse el encuentro en El Sadar fue el de Rafael Gálvez. El cordobés entró en el once por el sancionado Luso después de que el maño fuese expulsado por la doble amarilla que vio en la jornada anterior en el Nuevo Arcángel contra la Ponferradina. Ante los bercianos y el Real Zaragoza había repetido la alineación José Luis Oltra, pero Gálvez cumplió con creces su cometido en el centro del campo junto a Sasa Markovic. Muy activo, sin sufrir en la salida del esférico y dejando claro que quiere ir a más en el "equipo de su vida", como declaró el día de su presentación.

El cordobés estaba "contento y satisfecho por el trabajo del equipo". Los blanquiverdes se llevaron un punto del estadio del líder de la categoría con oficio, o "más con el corazón que con técnica o calidad". Pero de vez en cuando en esta complicada categoría toca atarse los machos para combatir con trabajo. "Al Córdoba le sobra calidad, pero también vemos que todo jugador se deja la piel en el campo. Si cada uno trabaja como nunca el equipo suma y nos vamos de Pamplona con un punto bien merecido", declaró. Para finalizar, Gálvez comentó la última acción de Jean Paul Pineda. "No podemos achacarle nada porque también trabajó bien". El chileno entró por Florin y encaró sin suerte la meta de Nauzet para terminar cayendo antes de entrar en el área. "El punto nos sabe a gloria", añadió.

 Razak Brimah: "Esperamos que la racha del equipo se alargue"

El hombre más destacado del Córdoba fue el portero ghanés. Su seguridad bajo palos y las buenas paradas que realizó (como un tiro de Merino que buscaba la escuadra o una que salvó en la línea de gol) posibilitaron que los andaluces no se fueran de vacío. "Sabíamos que veníamos a un campo muy difícil, pero queríamos hacer las cosas bien y trabajamos muy duro durante toda la semana para que así fuera", dijo nada más acabar el encuentro sobre el césped a nuestros compañeros de Movistar +. Deseó que la racha de resultados (siete puntos de nueve posibles) "se alargue en el tiempo y dure mucho".

Ensalzó la labor de todo el equipo, aunque centró su atención "en la gran defensa" de los cordobesistas. Y no le faltaba razón al arquero porque Stankevicius, Deivid, Rodas y Cisma estuvieron a un muy buen nivel. Sin embargo, es cierto que el estado de forma de Razak destaca por encima del resto. "Tenemos un míster que junto con su equipo trabaja muy bien y nos hacen sentir muy cómodos". El internacional no quería entrar en alabanzas personales y se limitó a sonreír una y otra vez. Esa es la mejor carta de presentación para los que están ahora descubriendo al portero califal: la humildad.