Un Levante (casi) de Primera

Decir que el Levante, próximo rival del Córdoba, será equipo de Liga Santander (Primera división) la próxima temporada no conlleva ningún riesgo. Y aún estamos en febrero. El conjunto valenciano suma ya 55 puntos a estas alturas, merced a 17 victorias, 4 empates y 4 derrotas.

La historia también avala su ascenso, porque mirando apenas las últimas siete temporadas todos los equipos que eran líderes de Segunda a estas alturas acabaron subiendo (Hércules, Celta, Deportivo, Elche, Eibar, Las Palmas y Alavés). Casi todos ellos, además, sin tener que disputar un play off de ascenso –la excepción fue Las Palmas, que tuvo que ganarse el ascenso ante el Real Zaragoza in extremis-.

Para colmo, ningún equipo había aventajado en tantos puntos a un tercer clasificado en esta categoría en, al menos, la última década. Ni siquiera el gran Real Valladolid de la 2006-07 mejora los números del Levante de Muñiz a estas alturas –los de Mendilíbar sumaban 54 puntos y aventajaban en diez al tercero, la U.D. Almería-. El año pasado, por ejemplo, el Alavés apenas le sacaba al término de la jornada 25 cinco puntos al tercero, el Real Oviedo.

Si a todos estos datos se le suma que los azulgrana llevan cinco victorias seguidas como locales, que son el equipo menos goleado y el Córdoba el menos goleador y que los blanquiverdes aún no han ganado en 2017… el panorama pinta desolador. Pero, ojo, uno de esos cuatro choques en los que el Levante ha salido escaldado se jugó en El Arcángel y fue, probablemente, el mejor partido en Liga hasta el momento del Córdoba. ¿Por qué no soñar con repetirlo?