Un Córdoba duro de pelar

El dato lo expuso Álvaro Vega ( @laligaennumeros ) al término del encuentro de Soria: “El Córdoba inicia la Liga 2016/17 con 1 derrota en las 9 primeras jornadas; solamente hizo algo así en 2ª división en 2000/01 y en 2007/08”.

La dolorosa pifia de Huesca (3-0) fue el punto de inflexión de un grupo que recuperó las señas de identidad con las que comenzó la temporada y, desde ese momento, acumula cinco jornadas consecutivas sin morder el polvo (tres victorias y dos empates).

En la 2000-01, con Escalante al frente, el equipo cordobesista fue capaz de empatar a uno en la misma novena jornada en el mismísimo Vicente Calderón (estadio al que llegó y del que salió líder tras el gol de penalti de Melgar). En ese margen al técnico cordobés le dieron un aviso porque empató los dos primeros choques (Getafe y Levante) y perdió el tercero (1-0 en Huelva). Pero a partir de ese momento encadenó cinco triunfos seguidos (Jaén, Compos, Betis, Racing de Ferrol y Badajoz) que le auparon a lo más alto. Luego, ya se sabe, el bajón y el despido de Lleida y la mera permanencia holgada.

En 2007 otro entrenador cordobés, Paco Jémez, lideraba el proyecto del recién ascendido equipo cordobesista. Después de empatar ante Celta y Nàstic y de caer ante Cádiz (en Copa) y Málaga (4-1) los blanquiverdes vencieron consecutivamente en casa a Sevilla Atlético y Cádiz en el Carranza, igualaron frente a Granada 74, Tenerife y Salamanca para cerrar su recuperación venciendo 0-2 en Mendizorroza (Asen y Arteaga marcaron).

Dicen que cuando no se puede ganar, no perder es la clave. A pesar de que la victoria se cotiza tres a uno con relación al empate, ¿quién sabe si no perder en Soria supone el punto que marca al final la línea entre la gloria y la pena? En cualquier caso, para lo psicológico es indiscutible que mantener a raya el casillero de derrotas es clave.