Solo Oli mancha la estadística local en los CCF-Oviedo

Tanto viejo como nuevo Arcángel se le han dado bastante regular al Real Oviedo a lo largo de su historia. De las treces veces que los carballones han cruzado la península para visitar Córdoba apenas han ganado en una oportunidad.

Eran buenos tiempos para ambos cuando cruzaron sus destinos por primera vez. Concretamente el 20 de enero del 63, cuando ambos estaban en Primera. El Córdoba no dio opción alguna al equipo entrenado por Otxoa -4-0 con goles de Miralles (2), Martínez y Paz-. En la 63-64 otra victoria (2-1 en la jornada inaugural de esa campaña, tantos de Miralles y Cabrera por un lado y de José María por el otro).

En la tercera oportunidad, en la 64-65, otra victoria con otro gol de Miralles –auténtica bestia negra ovetense en estos choques-. Ya no coincidirían nunca más en la élite.

En Segunda, en la 70-71, primer punto que rascaron los asturianos, que acabarían regresando a Primera al año siguiente. El resultado fue 0-0, el mismo que –curiosamente- se produjo en los otros tres empates que se han vivido entre Oviedo y Córdoba.

Desde 1978 el Córdoba ha logrado cuatro triunfos y sufrido una única derrota, que sucedió en 2002. Un gol de Oli en la recta final del choque amargó el partido al equipo entrenado entonces por García Remón. El portero que defendió la meta del Oviedo era Esteban, el mismo que presumiblemente esperará su oportunidad desde el banquillo este domingo.

En la penúltima jornada de la 2002-03 el Oviedo descendió en El Arcángel –aunque estaba condenado virtualmente desde semanas atrás-. Marcó Moisés en el 50’ en un partido que acabó con las expulsiones de Paredes y Ramzi.

Ahí comenzó un triste periplo para la fiel afición del Tartiere, que no conoció el fútbol profesional hasta su ascenso en Cádiz en 2015. Así, el año pasado regresó a El Arcángel para recuperar su vieja costumbre de perder en su verde. 2-1 con dianas de Fidel y de su actual jugador Nando para los blanquiverdes y de Toché para sus intereses.

Apenas tres goles encajados y una única victoria sufrida en trece visitas asturianas. Una historia que invita a ser moderadamente optimista cara al importantísimo choque de este domingo.