Mucho ha llovido desde aquel gol imposible de Adil Ramzi

17 de febrero de 2017 | Liga 1,2,3 | Toni Cruz

El Córdoba apenas ha ganado en tres de las 22 ocasiones que se ha enfrentado al Levante en Valencia. La última victoria, en circunstancias parecidas,en 2003

Ni siquiera los antecedentes conceden una tregua al optimismo antes del partido del sábado en el Ciutat de Valencia ante el Levante. El Córdoba ha visitado las dos casas del equipo granota en 22 oportunidades y apenas ha vencido en tres de ellas.

La primera vez que el Córdoba C.F. jugó en Valencia ante los azulgranas fue el 2 de diciembre de 1956 y resultó todo un éxito. Por aquel entonces el club dirigido por Juncosa se iba haciendo grande en Segunda y se impuso con claridad a los de Escolá. El marcador de Vallejo –el primer campo de la historia para los levantinistas- marcó al final un 2-3 (Paz, Araujo y Hermida marcaron para los blanquiverdes y Paredes y Moix para los locales) que refrendó las opciones de ascenso –finalmente no cuajó- del Córdoba.

Tras cuatro triunfos locales consecutivos (4-3, 4-1, 2-0 y 2-0), en la gloriosa 61-62 el Córdoba volvió a ganar (1-2: Homar y Vázquez hicieron estéril el tanto de Torrents). Ya en Primera los dos choques entre ambos (63-64 y 64-65) se decantaron para los valencianos (1-0 y 2-0).

Tendrían que pasar más de 40 años para que un equipo blanquiverde se impusiera en el campo del Levante. Ya se habían mudado de Vallejo a su actual recinto, aunque entonces se le conociera como Nou Estadi (antes se había llamado Antonio Román en homenaje al presidente bajo cuyo mandato se construyó).

Sucedió en la 2002-03 y el panorama tenía cierta similitud con el actual. Era la jornada 36 y mientras que el Córdoba peleaba por no bajar, el Levante tenía una batalla por ascender junto a Murcia, Zaragoza y Albacete. Montenegró coló en el minuto 1 un gol esperanzador que neutralizó Amato de penalti en el 26, pero el marroquí Adil Ramzi logró de inverosímil forma el 1-2 ante un sorprendido Aizpurúa en el minuto 70, “pese al desesperado intento de Olías de sacar el balón”, según la crónica de Mundo Deportivo. García Cantarero entrenaba a los levantinistas y Zambrano a los cordobesistas. La leyenda cuenta que durante ese choque Mijatovic, que ocupaba plaza en el banco, se negó a calentar.

Desde entonces, sinsabores continuos de diferente calibre. Dos empates –a dos en la 03-04 y a 0-0 en la 09-10- y dos derrotas, un claro 3-0 en 2008 y el 1-0 de la temporada de Primera por culpa de un gol de Barral.

Al margen de todos estos choques, el Córdoba también perdió un ascenso a Segunda ante el Levante en la liguilla de la campaña 95-96. El empate a cero en Valencia fue, a la postre, insuficiente.