“La situación está complicada pero ojalá consigan el objetivo”

El Valladolid llega el domingo a Córdoba. Sin embargo, Deivid, el capitán cordobesista hasta el pasado verano, no podrá pisar el terreno de juego por una lesión que lo tendrá apartado del verde varios meses. Fue hace dos semanas en Granada cuando se lesionó el central canario, que ya está trabajando en volver lo antes posibles a estar disponible para Luis César Sampedro.

En una entrevista concedida a Radio Marca Córdoba, Deivid, que hizo balance de la situación del CCF y de su salida de la entidad blanquiverde el pasado verano, comentó que “estoy trabajando desde el día siguiente al que me lesione y parece que va muy bien. El lunes me hago otra resonancia pero las sensaciones son muy buenas”. Al igual de lo que ya hizo el curso pasado en el Córdoba, el ex de Las Palmas busca en acortar los plazos: “Voy a intentar todo lo que esté en mis manos porque no sirvo para estar lesionado”.

Tras lesionarse en Granada, Deivid se acordó de la cita en El Arcángel: “Es triste porque el partido de Córdoba lo tenía marcado en el calendario desde que empezó la temporada”. En este sentido, añadió que “fue un palo gordo porque quería estar, jugar, vivir el ambiente e iba a ser especial y diferente pero el destino ha querido que no estuviese en el campo”. No obstante, la idea del central canario es estar presente en el estadio ribereño: “Creo que sí. Me estoy recuperando en Canarias pero el lunes tengo pruebas en Valladolid y si todo va bien estaré en El Arcángel”.

Uno de los aspectos que más le está costando en Valladolid es “el frío”. “Este año ha sido bastante duro y es lo peor que llevo porque por lo demás estoy súper adaptado a la ciudad”. No obstante, reconoció que estas bajas temperaturas “se suplen con otras cosas, como el trato y el sentirme querido”. También reconoció que fue clave la figura de Antoñito: “Me ha dado la vida. Que él fuese allí, fue un tanto por ciento alto para que yo fuese también allí”.

Sobre el Valladolid, Deivid apuntó que “por nuestra manera de jugar” encajamos bastantes goles pero “en esta segunda vuelta ha cambiado porque no jugamos tan abiertos y arriba tenemos un bicho (en referencia a Mata) que tiene media y la mete para dentro”. Eso sí, reconoció que el objetivo “es el ascenso. Ahora estamos en la pelea por todo e intentaron llegar en ese pelea en las diez últimas jornadas”. “Tenemos una plantilla buena y en diciembre nos hemos reforzado bastante bien y hemos dado un salto de calidad”, comentó el central canario. Además, el conjunto pucelano llega a la cita del domingo tras vencer al líder, un “Huesca que está haciendo una temporada increíble y me alegró muchísimo por Emilio (Vega) porque se lo merecía”.

Respecto al partido ante el Córdoba, Deivid señaló que “los dos equipos tienen que ganar sí o sí, ya no hay vuelta atrás a estas alturas de la temporada. Las oportunidades no vuelven y no hay margen de error”. Desde la distancia ha seguido todo lo que ha sucedido este curso en el Córdoba: “La verdad es que ha habido de todo. He sentido mucha tristeza de ver al equipo sufriendo de esta manera. Entras en estas dinámicas y encima lo que rodea es todo problemas y negatividad… se demostró que no era el camino correcto y los resultados están ahí”. “Ahora la nueva propiedad están corrigiendo cosas y todo parece que va encaminado pero el equipo está lejos y 13 puntos son muchos. La situación está complicada pero ojalá consigan el objetivo. Tengo esa esperanza”, apuntó Deivid.

“Me intento enterar de cómo va todo y que le vaya todo bien al Córdoba. Desde la llegada de la nueva propiedad, se ha dado giro a nivel deportivo y a nivel social se han intentado arreglar cosas que estaban abandonadas en el club, pero la situación que han cogido es difícil”, reconoció el central canario. Además, agregó que “el presidente nuevo ha intentado hacer de todo pero es una pena que no se estén dando los resultados”. También “me ha dado pena por Jorge (Romero) porque es un entrenador fenomenal. Conozco pocas personas tan preparadas como él”.

Sobre su salida del club el pasado verano, Deivid fue muy claro: “Me dolieron las formas y me cabreó muchísimo y todo lo que termine en ísimo. Este circo está montado así y cada vez a la gente le importa menos los sentimientos”. “Lo he dado todo en el Córdoba e hice todo lo que estaba en mis manos porque todo funcionase de la mejor manera”, recordó el ex de Las Palmas. También expuso que “me la jugué con la lesión de cadera acortando los plazos y no se valoró cuando era lo más justo”. Luego llegó esa frase de que “no daba el perfil y me tuve que marchar. Te faltan el respeto e intentan ningunear, lo mismo era lo que pretendía, y me tuve que marchar”.

Tras su marcha, el equipo es el más goleado de la categoría: “He intentado pensarlo lo menos posible porque la vida sigue y al final no rindes en el equipo que estás y tampoco es justo”. “He estado pendiente de todo lo que pasase en Córdoba y se me hizo difícil al principio pero luego miré por mí”, explicó Deivid. También apuntó que “él (por Carlos González) no está allí y el fútbol y la vida en general pone a cada uno en su sitio”. “Al final, la propiedad anterior era especial, por llamarla de alguna manera, y que se hiciese público no ayudó mucho a Luis (Carrión)”, comentó el exjugador cordobesista tras lo vivido en la primera vuelta con la posible destitución del técnico catalán y esa reunión en el palco del José Zorrilla a vista de todos. De hecho, Deivid apuntó que “se les ha ido viniendo todo encima y este año cuando creían que iban a inventar el fútbol… al final no fue el camino correcto”.

Por otro lado, Deivid reconoció que “estuve  en el partido con el Tenerife y lo pase mal. Me sentía raro, tenía nervios y parecía que iba a jugar yo”. “Al final, el sentimiento que tenemos tan especial a la ciudad es muy grande y siempre lo he dicho, si fuese por mí hubiese acabado mi carrera en el Córdoba pero no me dejaron”, aclaró el ex de Las Palmas. Ahora “si voy me sentiré raro”. También reiteró su compromiso con el Valladolid, con el que tiene un año más de contrato pero “después ya veremos”. “En el momento que estuve en Córdoba, mi idea era no moverme más. Ojalá algún día se den las circunstancias para que vuelva otra vez a jugar en el Córdoba”, señaló Deivid, que dio las gracias porque “a día de hoy me llegan infinidad de mensajes de cariño”. “Es una afición fiel al equipo esté en la categoría que sea y eso hace al equipo y a la ciudad grande. Los jugadores lo están dando todo y ojalá el equipo consiga lograr el objetivo porque así podrán disfrutar de un Córdoba libre y en Segunda División”, apuntó el excapitán blanquiverde.