Juli invita a otra ronda

La Copa Mola

Sí, la Copa mola por cosas como esta. ¿Quién iba a decir al cordobesismo que los suyos eliminarían al equipo que se cargó al Real Madrid el año anterior? Nadie. Es cierto que el formato podría ser más interesante, es cierto que podrían ponerse menos trabas a los pequeños, pero esta competición tiene un no sé qué que qué sé yo. Seguimos adelante.

Un polaco, un italiano y un español

No, no es ningún chiste, sino el Córdoba. El polaco es Pawel, que sigue en su línea: un auténtico  seguro de vida, y lo demuestra paradón a paradón. El italiano es Piovaccari, que se estrenó como blanquiverde con un cabezazo imperial, inapelable, impresionante e imparable; bueno, quizás sí era parable, pero da bastante igual. Y el español es Juli, que merece párrafo aparte. Este podría ser el resumen perfecto del partido ante el Cádiz.

Omnipresente Juli

El alicantino estuvo en todas. Jugando en la mediapunta, y no en la banda como ha hecho hasta ahora, anotó el gol que le dio vida al partido y asistió a Piovaccari para que hiciese el segundo. En la segunda parte se vio menos, pero porque era el momento de remar, nunca mejor dicho. El Córdoba tiene un jugador de quilates, hay que crecer en torno a él.

Cantera al poder

Siguió Bijimine y debutaron como titulares Pablo Vázquez y Galán. El central estuvo serio y correcto, el Córdoba puede estar tranquilo con él en caso de necesidad. El lateral, aunque no es lateral, tuvo más problemas; jugar en una posición que no es la tuya no ayuda mucho y, si encima tiene que echarte una mano Bergdich, estás apañado. Habrá que verlo un poquito más para valorar. Quiles y Vito se quedaron en el banquillo, su oportunidad no tardará en llegar.

Volvió el capitán

Enfrente, dos jugadores que dejaron huella. El primero, a nivel nacional: Dani Güiza con su gol a Rusia en semis y la Eurocopa de 2008. El segundo, el que más toca a los blanquiverdes: Abel Gómez, capitán del ascenso, el capitán del Gran Canaria. Sigue conservando su toque, ahora más cerca del área. El del pelo blanco siempre hará que esbocemos una sonrisa y nos traslademos de nuevo a ese momento. Gracias de corazón.