"En casa competimos bien"

Luis Carrión explicó en sala de prensa este viernes que, naturalmente, lo vivido en el Anxo Carro le conllevó “un día difícil”, más que nada por la segunda mitad, porque “la primera parte estuvo más o menos controlada, en la que pudimos ponernos por delante. Ellos también tuvieron alguna. Más que en juego, fue en alguna situación de pérdida nuestra o estrategia. En la segunda es verdad que no fuimos capaces de tener el balón, llegar a portería, descansar con él y sufrimos con eso porque mentalmente agota, y más cuando te llega un gol al final”.

Después de un largo viaje de vuelta desde Lugo, el aspecto físico puede ser determinante el domingo, aunque “el Nástic también ha tenido tres partidos y un viaje a Córdoba. Al final el cansancio físico es una mentira. Si tienes una motivación alta te vas a dejar la vida. Si no la tienes te van a superar. Un entrenador me decía que tú llegas cansado a casa, te asomas a la ventana, ves que te van a robar el coche y bajas a toda hostia. No existe el cansancio. El otro día viene por no tener el balón”.

El gran problema de este equipo está siendo defensivo, aunque el técnico dice que ya ha “hecho de todo. Presionar arriba, estar más juntos, con un mediocentro, con dos, de todo. Contra mejores y peores equipos. Hemos mantenido la portería a cero contra el mejor equipo ofensivo de la liga, el Tenerife, y otros partidos no. Trabajo mucho la línea de cuatro, otras veces la presión arriba es mala y te llegan con facilidad. Entiendo que el equipo está formado para tener el balón, presionar arriba. Hemos demostrado que sufrimos menos así y es lo que intentamos. Estando lejos de la portería cometemos menos errores”,

El Córdoba no ha empatado todavía este año, algo propio de la idiosincrasia del equipo de Carrión: “si hacemos el análisis en diez partidos podemos decir que es casualidad, si pasa  a menudo podemos decir que es mi forma de jugar. En el B, creo que nos ha salido bien, el año pasado probablemente también. Entiendo ir a ganar los partidos hasta el final, y eso implica que te ganen o ganes tú. A día de hoy siempre había ido bien esa forma de pensar. Un punto no me gusta. Tú pierdes dos y ganas uno y tienes tres puntos, lo mismo que empatar los tres. Yo creo que ir a por los partidos implica que el empate sea difícil”.

Al Córdoba le cuesta tanto remontar un encuentro que, de hecho, todavía no lo han logrado en la presente temporada: “todas las veces que se han puesto por delante nos han ganado. Nos pesa demasiado” aunque Carrión exceptúa que el choque de Lugo “fue diferente. La primera parte competimos bien y la segunda todos veíamos venir que nos iban a marcar, y fue un palo fuerte. Estoy siempre en la idea de levantar la cabeza después de un gol o partido malo, es mi forma de ser. Soy una persona fuerte y espero que mis jugadores lo sean igual y sean capaces de entender que cuando nos metan un gol se puede remontar. Sigo trabajando igual porque creo que es la forma de cambiarlo”.

Al menos como locales los blanquiverdes están fuertes y desean seguir estándolo tras la visita del Nàstic: “llevamos una racha muy buena en casa excepto los dos primeros partidos en los que creo que competimos bien. En casa siempre competimos bien. El año pasado estuvimos bien también y esperamos hacer un buen partido para conseguir tres puntos y así pensar que de una semana de tres partidos hemos conseguido seis puntos”.

Sobre el rival, el equipo que fuera suyo entre 2003 y 2005, relató: “he visto varios partidos de ellos, sobre todo desde que está el entrenador nuevo. En Tenerife les costó un poco más salir, pero el Tenerife hizo un gran partido. El otro día estuvieron muy bien contra el Granada. Apretaron, corrieron, es un equipo rocoso y difícil de llegarle y hacerle gol. Tienen gente buena arriba como Barreiro, Uche o Delgado, que son buenos de la categoría. Si damos lo que tenemos que dar estaremos cerca de la victoria, respetando siempre al rival. En casa siempre hemos demostrado que hemos competido bien”.

El catalán se mostró algo molesto cuando fue preguntado por su relación con el propietario tras el mal arranque: “si hubiera hablado con él no lo diría, no sirve de nada, porque luego cada uno hacéis vuestras suposiciones. Hablo con él bastante, unas veces está más triste y otras más contento, como todos vosotros supongo”.