El Nàstic suele sufrir en Córdoba

Los precedentes son muy agradables para el Córdoba este sábado. El Nàstic nunca ha ganado en Liga en El Arcángel. Ni en el Viejo, ni en el Nuevo ni en el actual ‘Viejoven’ recinto del Arenal. Ni en Segunda ni en Segunda B. Sí ha conseguido un triunfo (y claro) en Copa, en uno de los peores momentos históricos del club blanquiverde.

La primera vez que los nàstiquers bajaron a Córdoba para jugar aún no se podía llamar Nàstic. El entonces Gimnástico de Tarragona –año 72, aún vivía Franco- cayó derrotado ante el equipo entonces dirigido por Vavá, que tenía ínfulas por su reciente paso por Primera pero que sufrió hasta el minuto 88, cuando el matador Manolín Cuesta coló el 1-0 final. El once victorioso lo formaron: Molina; Piñel, Rodri, López, Escalante, Rojas, Tejada, Alarcón, Jiménez, Manolín Cuesta y Garrido.

Ambos equipos siguieron en Segunda en la 73-74 y se volvieron a medir en El Arcángel -30 de septiembre del 73- repitiendo resultado, aunque esta vez el tanto del triunfo local llegó pronto (minuto 3: Martínez). Al año siguiente, otra vez la moneda cayó de cara (2-0, tantos del pichichi Burguete). El primer gol de los tarraconenses en Córdoba llegó en la 75-76, lo marcó Masferrer y no les sirvió de nada (perdieron 3-1 y, de hecho, bajaron a Tercera).

Los siguientes Córdoba-Nàstic fueron en Segunda B. En la 78-79 y en la 80-81 coincidieron en la categoría de bronce y allí sí sumaron un punto al menos (1-1 en la primera cita, en la segunda 2-0).

Después de un largo ostracismo, el Nàstic regresó a Segunda de manera efímera en 2001. En noviembre de ese año, consiguió empatar a uno en El Arcángel, empatando Masnou el gol inicial de Jonathan Sesma. Tres años y un ascenso más tarde, el Nàstic de Luis César Sampedro visitaba el campo donde jugaba la tristemente recordada generación de la gorra. El encuentro supuso la única victoria de Robert como técnico cordobesista y, de hecho, la única en las 19 primeras jornadas de un grupo que acabaría bajando (2-0 dianas de Montenegro y Selu). Al año siguiente, con los nuestros un escalón por debajo, llegó la única victoria catalana en Córdoba (un 0-3 incontestable merced a Diego Torres, Codina y Bolo).

En la 2007-08, con Paco en el banquillo local, empate a dos con goles de Arteaga y Asen; empate a cero en la siguiente y a uno en la 09-10 (Arteaga y Rubén Navarro colaron) y victoria con gol de Pepe Díaz en 2011. En 2012, festival anotador: un 4-2 en el que marcaron Gaspar, Pepe Díaz, Borja y Dubarbier por un lado y Tuni y Raúl Fuster por el otro. El Nàstic bajó al final de ese año y hasta el año pasado no regresó por estas latitudes… para volver a perder 2-0 por culpa de la pareja Fidel-Florin Andone.