El gol que se fue

21 de noviembre de 2017 | Liga 1,2,3 | Toni Cruz

Desde la llegada de Merino el equipo bajó su promedio de goles en contra, pero no logró dejar en ningún choque la portería a cero. Apenas dos tantos a favor en cinco choques

Si algo está caracterizando al Córdoba de la era Merino es por la fuga del gol. A diferencia del periodo de su predecesor, Luis Carrión, ahora Kieszek tiene que recoger pocas veces la portería de sus redes… aunque, por el contrario, tampoco ha habido muchas ocasiones para celebrar goles en el último mes y medio.

En los cinco partidos con Merino, el Córdoba ha encajado seis tantos (1,2 de promedio). En los diez anteriores, con Carrión, el equipo blanquiverde encajó 23 (2,3 por encuentro, casi el doble). Una bajada sensible, aunque todavía no ha sido capaz de dejar su portería a cero (no lo logra desde su último triunfo, hace siete semanas).

El problema lo tiene este equipo últimamente, y cada vez más, cuando tiene que generar fútbol de ataque. Apenas dos goles en los cinco últimos encuentros –uno de penalti- y ambos con el mismo protagonista –Jona-. Una media de 0,4 goles por encuentro que empeora sensiblemente el 1,3 de la época de Luis Carrión.

En suma, que como para ganar es necesario marcar, Merino tendrá que invocar al espíritu del gol fugado ante la Cultural… y luego que se quede en lo que resta de temporada. Eso sí, para que se dirija a la portería correcta, claro.