El fortín imposible

9 de enero de 2017 | Liga 1,2,3 | Toni Cruz

Los malos números del Córdoba como local le mantienen fuera de la zona de play-off. La demanda de suplementos y entradas para Copa no augura una gran entrada

¿Qué le pasa al Córdoba en casa? No lo sabe ni el propio Carrión, que respondió en sala de prensa el sábado tras el 0-0 ante el Rayo que “trabajamos igual cuando jugamos en casa que fuera. Nos cuesta un poco más aquí. Llegarán las victorias en casa”. Lo cierto es que –dato de @laligaennumeros- de los últimos 67 partidos en El Arcángel el Córdoba únicamente ha ganado 18, por 20 empates y 29 derrotas. De los últimos seis como local, de ello, el equipo blanquiverde ha empatado dos y perdido cuatro.

Unas cifras que, sobre todo teniendo que remontar posiciones, deshacen cualquier esperanza de ascenso que se pueda tener por mucho que a domicilio el rendimiento esté siendo notable.

El Córdoba, casi mejor, tendrá que afrontar sus dos próximos compromisos ligueros bastante lejos de El Arcángel –primero Girona y luego Tenerife-. Así cerrará una vuelta y comenzará la definitiva. Antes de ambos envites, eso sí, quedará por resolver una prueba doméstica. Y menuda prueba.

Porque para acceder a cuartos de final de Copa –ronda en la que únicamente ha estado el Córdoba en dos oportunidades en su historia- El Arcángel tendrá que ver ganar a su equipo (o eso o sufrir en una tanda de penaltis si no marca nadie). El rival, el Alcorcón, no tiene demasiado tirón –sí lo debería tener el encuentro en sí, pero esa es otra historia- y encima la cita es en día laborable –miércoles- y a media tarde -19:00-. Para dificultar aún más la presencia de aficionados en El Arcángel, el club decidió que los abonados pagaran cinco euros para acceder al recinto. Una cantidad casi simbólica, pero que ha incomodado a un sector importante de la afición. De momento, la respuesta de abonados y público en general ante las taquillas está siendo escasa.

Por unas cosas y por otras, y a pesar de las buenas cifras de público que suele registrar el estadio, lo de hacer de El Arcángel un fortín parece una misión complicada. Casi imposible.