Alejandro González: "el problema del equipo es mental"

12 de enero de 2017 | Liga 1,2,3 | Toni Cruz

El nuevo presidente del Córdoba expresa que intentará "ser más plano" que su predecesor y que se marchará "cuando consolide al equipo en Primera"

 

El nuevo presidente del Córdoba, Alejandro González, ha atendido a la prensa en la mañana de este jueves en una reunión mantenida en forma de desayuno informativo que duro más de hora y media de preguntas y respuestas. El mandatario, que se definió como “un empleado más dentro del Consejo” contestó en tono distendido y conciliador a cuestiones relacionadas con los aspectos deportivos, societarios e institucionales del club.

Entiende González que aunque su padre “lo estaba haciendo muy bien” entiende que “el desgaste que ha habido estos años generó figuras que iba a ser difícil resolver determinadas cuestiones. No era necesario el relevo, pero viene bien”.

Sobre la situación económica, considera que el Córdoba es “un club saneado, porque la deuda neta es positiva. En julio de 2017 finaliza el último pago del Concurso y después habrá un pago de 500.000 euros. Nos gusta hacer operaciones que financieramente no son buenas pero a corto plazo nos dan más solidez. Tenemos que agradecer que hayan sido tan estrictos con nosotros porque así evitamos denuncias de AFE”. De cualquier modo, atendiendo a la respuesta sobre si se tendrá que invertir en traspasos para mejorar el nivel deportivo, adujo que “no existe relación directa entre inversión y éxito deportivo. En cuanto a flujos de tesorería está muy bien el club también, pero eso no significa que tenga nueve millones para hacer lo que quiera”.

Además, entiende que “el problema del equipo no es de jugadores, ni de entrenador, es mental. El equipo hace un fútbol que no se ve en la categoría, ayer lo vimos también. Vamos a seguir trabajando para dotar a Luis y a los chicos para que esa fragilidad acabe”.

Espetó el nuevo presidente del club sobre la intención de unir a todos los colectivos peñísticos que “tenemos en clave interna la intención de realizar una estrategia para unificar a la afición. No es normal que existan pequeñas fracturas entre nosotros. El club va a actuar de chicle en ese sentido”. Con la agrupación de Veteranos “es algo diferente, porque fueron ellos los que quisieron romper. Nosotros no hemos roto nada en ese aspecto”. Por cierto, se esbozó la idea de un museo del club: “me encantaría hacer un museo espectacular, lo tengo ya en la cabeza. Como la Ciudad Deportiva va a ser realidad y en ese espacio se acogerá ese tipo de instalaciones. Lo que pasa es que ahora es hablar de humo. Tenemos que enganchar a la gente joven a que sea cordobesista”.

También habló del Sindicato de Accionistas Minoritarios, que “no representa a la totalidad de los accionistas minoritarios. Existen alrededor de un millón de acciones fuera de éste, cuentan con un 20 por 100. Lo que es importante es que lo que dice el SAM no representa a lo que piensa el resto de accionistas minoritarios. Corresponde al talante que ha tenido el SAM con el órgano de gobierno saliente. Si hubiese tratado con respeto su gestión, que ha sido el que ha salvado la economía del club… Con el resto de accionistas minoritarios, tengo mi despacho abierto para que vengan a resolver sus dudas. Para no montar los cirios que montaron en la última junta tienen que sindicarse legalmente. Si hubieran entrado esa junta era impugnable”.

En lo que se refiere al trato con los medios, “no va a haber ningún impedimento para que podáis hacer vuestro trabajo. Este formato innovador de entrevista coral es porque va a haber variación en las circunstancias y puede crear conflictos. Vamos a tratar de generar igualdad entre los medios”.

 

Abundando en la idea de reforzar el equipo con traspasos, contó que “sólo el tres o cuatro por cien de los fichajes en Segunda conllevaron un traspaso, y el 80 por 100 los pagó el Levante. Tenemos que dejar de lanzar el mensaje de que si el club no paga traspasos no está dejando de invertir en plantilla. El departamento técnico está trabajando para la posible incorporación de jugadores. Nuestro compromiso es que lo que se necesite se va a ayudar a tener. Lo que falta no son jugadores, sino el aspecto psicológico. Una plantilla comprometida, que si no gana en casa termina destrozada porque disgusta a la afición”. Además, recalcó que “Carrión me transmite que está contento con la plantilla que tiene. Sabe exprimir los recursos que tiene y cree en lo que tiene. Los matices serán para completar. Creo que hay cosas más importantes en la plantilla que el hecho de incorporar. Si jugáramos siempre como en la primera parte seríamos campeones de Liga Europea”.

También habló de la Ciudad Deportiva –la que aún no se ha construido y la que se está remodelando-. Sobre la futurible, “vamos a recurrir el fallo judicial, al margen de que queramos sentarnos con el Ayuntamiento. No nos gusta que la principal institución de la ciudad lleve a los tribunales a la ciudad por una instalación que va a facilitar la práctica del deporte entre los niños cordobeses. Es importante que el club tenga recursos propios”. Y sobre la actual, “está inmersa en un proceso externo al Córdoba para descubrir cuál es la titularidad de dicha parcela. La particularidad que tiene es que no es sólo la parcela de la Ciudad Deportiva, sino la lucha entre Tremón y Arenal 2000 con contratos de otras parcelas. Hasta que no se resuelva… Intentaremos avanzar paralelamente al proceso de la Ciudad Deportiva”.

Por último, cabe recalcar su intención de ganarse la confianza del cordobesismo desde la naturalidad: “voy a intentar ser más plano. Voy a intentar dar menos exclusivas o titulares, para tener más tranquilidad. Soy consciente de que me tengo que ganar la confianza del cordobesismo, y de otros agentes, no porque no la tuviéramos antes. Sobre mí lo único que pueda existir es escepticismo, no saber por dónde voy a ir” y, por otra parte, los retos que se plantea para su presidencia: “mi idea sería entrar en Primera y consolidar al equipo. Se está generando una estructura para cuando vuelva a Primera”, porque, como ya dijo antes de su primer Consejo como presidente, “cada año que el Córdoba esté en Segunda es un fracaso”.