Ganar como receta

El Ángel Ximénez AVIA Puente Genil visita este sábado (17:00 horas, LaLigaSportsTV) uno de sus pabellones malditos desde que compite en la Liga ASOBAL: el David Santamaría de Guadalajara. Los cordobeses nunca han puntuado como visitantes en sus enfrentamientos anteriores con el conjunto morado – dirigido por el también cordobés César Montes – y tras el durísimo golpe que le asestó el Sinfín en el Miguel Salas no piensan en otra cosa que no sea la de seguir manteniendo su dinámica positiva lejos de Andalucía.

Los de Julián Ruiz, decimoterceros en la tabla con dos puntos de margen sobre la zona de descenso y con la diferencia de goles a favor, viajan a tierras alcarreñas con el objetivo de conseguir un buen resultado. La plantilla, tras una semana durísima en el plano anímico por seguir sin ganar en casa esta temporada, ha hecho autocrítica profunda que le ha llevado a reflexionar tanto a jugadores como cuerpo técnico para analizar una situación que sólo aparece cuando el Miguel Salas es el escenario en el que disputan sus compromisos.

La mala imagen mostrada ante los suyos la pasada semana en el primer partido en casa de la segunda vuelta ha sentado como una tremenda decepción, por lo que en esta ocasión ganar se convierte en la mejor medicina para curar sus heridas antes de iniciar su particular e inminente subida a los Pirineos. En el plano de efectivos, el entrenador cántabro podrá contar con todos sus hombres para una cita en la que la unión, la concentración durante sesenta minutos, y la disminución en el número de errores cometidos jugarán un papel decisivo para el devenir de una cita que en caso de victoria visitante, permitirá al Ángel Ximénez AVIA abrir distancias con Cangas y Teucro, que ya han saldado sus compromisos de la presente jornada con sendas derrotas.

Por su parte, el Balonmano Guadalajara tampoco ha iniciado bien el nuevo año. El cuadro morado ha cosechado dos derrotas en las primeras jornadas de la segunda vuelta (Granollers y Teucro) que, como mal menor, le sitúan en la novena posición con 15 puntos. Una situación y un número de puntos que le sitúa en tierra de nadie aunque sin opción de despistarse debido a la igualdad de la competición. Dos heridos frente a frente con un único objetivo: vencer.