24-34. Molina y Muñoz se ceban con un combativo Puente Genil

19 de octubre de 2016 | Balonmano | Pablo Mansilla

El Ángel Ximénez AVIA perdió ante el Naturhouse, quien concedió terreno a los de Quino Soler para tener sus opciones en la segunda parte

La realidad y la diferencia entre el Ángel Ximénez AVIA Puente Genil y el Naturhouse La Rioja es palpable. Los pontanenses cayeron con honor contra el conjunto franjivino (24-34) aunque de manera engañosa en el resultado final. Tras una primera parte para olvidar por las constantes paradas de Kappelin y el buen hacer de Mekaru, en la segunda los de Quino Soler desplegaron su lado más confiado y peleón con tal de poner en aprietos al equipo de Luisfe y Molina, quien se echó el equipo a la espalda para, junto a los contraataques letales, cerrar el marcador con diez tantos de diferencia.

Se quería hacer notar desde el principio el equipo de Puente Genil. En casa tiene el gusto de llevar la iniciativa en el juego, pero delante tenía un verdadero muro. El Naturhouse La Rioja no quería conceder facilidades a los de Quino Soler, hiperactivos en el lanzamiento de nueve metros. Mientras tanto, al cuadro franjivino, sobre todo a su primera línea, le pesaba tener delante a las torres del Ángel Ximénez AVIA. Sólo Albert Rocas desde el extremo era el que más claridad tenía para atacar y con acierto. De hecho los visitantes lograban una máxima de cuatro goles (1-5, min. 8) que comprometía al técnico local a parar el partido. No quería dejar a los riojanos seguir marcando un ritmo que arrebató a los pontanos, que curiosamente inauguraron el marcador por medio de un Rudovic que asumía todo el peso ofensivo del equipo.

Intentó apretar las tuercas en defensa el Ángel Ximénez AVIA, que tenía que frenar como fuese el potencial en ataque de los de “Jota” antes de que tomasen la directa. Asimismo, las paradas de Kappelin, quien acumulaba diez en quince minutos, impedían por completo a los pontanenses cualquier opción de recortar distancias. En el 14’, el resultado era de 2-8. Y seguía creciendo la brecha. No obstante, la exclusión de Sánchez-Migallón abría la posibilidad de dar confianza a los pontanos si aprovechaba la superioridad numérica, pero sólo pudo marcar un tanto que a la postre igualó Luisfe entrando con todo y llevándose lo que encontraba a su paso. En el Ángel Ximénez AVIA poco podía destacarse en la primera mitad, pero había que subrayar la positiva aportación de Atsushi Mekaru. Los minutos del nipón sirvieron para dar otro aire al juego local, que gozó de efectividad y claridad. De hecho, un parcial inminente de 2-0 hizo al entrenador del Naturhouse parar el partido en busca de esa reacción de los suyos. Sin embargo, no hubo manera y quien sí quería dar espectáculo era el cuadro pontanés. De nuevo Mekaru y una maravilla de Moreira aportaron cierta emoción en el tramo final del primer tiempo. No obstante, los riojanos tenían cuerda para rato. Hasta el punto de igualar la máxima de ocho tantos e irse al descanso 11-18 gracias al tanto de Mekaru desde siete metros.

Tras el descanso, mejoró de inicio la asignatura para los pontanenses. Parcial de 2-0 y Oliva parando como no había podido hacer en la primera media hora. Asimismo, la primera línea formada por Mekaru, Josic y Rudovic – inédita hasta la fecha en cuanto a productividad – hizo del Ángel Ximénez AVIA un equipo más trabajador, seguro de sí mismo, aguerrido, y el más indicado para, en este caso, inquietar al Naturhouse La Rioja. Apareció Carlos Molina para desatascar el ataque riojano. El cordobés, recién convocado por España, también quería minutos de calidad. Pero ante las dudas que podían surgir en el “Natur”, ahí apareció su entrenador. Sus gritos antes de formar piña en los tiempos muertos imponían, y de qué manera. Mantuvieron una diferencia de seis tantos que, a raíz de la exclusión de Peciña, redujo el cuadro pontanés. El público local también quería jugar su partido, y empezó a tirar del carro. De repente, el marcador reflejaba un 21-25 en el 48’ y ambos tenían que hacer un esfuerzo importante para cerrar el partido.

El conjunto logroñés quería llevarse los puntos. El pontanés también, aunque ya no pudo frenar la primera oleada de su rival. El 23-30 a cinco minutos del cierre del encuentro casi sentenciaba la papeleta a favor de un Naturhouse que, pese a lograr en el último suspiro la máxima diferencia (+11),  sudó para apretar más de la cuenta en la segunda parte contra un Ángel Ximénez que en la segunda media hora jugó sin presión y le permitió ofrecer una imagen combativa ante todo un equipo de Champions.

FICHA TÉCNICA

24. ÁNGEL XIMÉNEZ AVIA PUENTE GENIL (11+13): Oliva (p), Alberto Castro, Cuenca (2), Curro Muñoz, Ángel Paraja, Revin, Rudovic (2) – siete inicial – Nacho Moya (6), Fran Bujalance (1), Josic (3), Moreira (4), Mario Porras (1), Mekaru (5,2p).

34. NATURHOUSE LA RIOJA (18+16): Kappelin (p), Sánchez-Migallón (3), Albert Rocas (5), Peciña (1), Cacheda (2), Luisfe (2), Langaro (2) – siete inicial – Gurutz Aguinagalde (ps), Montoro (1), Víctor Vigo, Carlos Molina (5), Javi Muñoz (6, 4p), Ángel Fernández (5), Sanad (1).

PARCIALES CADA CINCO MINUTOS: 1-2, 2-5, 2-9, 4-12, 9-14, 11-18 (descanso) 13-18, 15-20, 18-24, 22-26, 23-30, y 24-34 (final).

ÁRBITROS: Luque Cabrejas y Pascual Sánchez. Excluyeron al local Revin y por los visitantes a Sánchez-Migallón, Peciña, y Víctor Vigo.

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la octava jornada de la Liga Loterías ASOBAL, disputado en el Pabellón Municipal “Alcalde Miguel Salas” de Puente Genil (Córdoba) ante 800 espectadores.