El Salerm Cosmetics Puente Genil entra en un bucle peligroso (1-1)

20 de enero de 2019 | | Pablo Mansilla

El equipo de Puentenueva vuelve a firmar un empate contra una UD Los Barrios en estado de gracia. Los rojinegros han sumado dos puntos de doce en la segunda vuelta

Un Salerm Cosmetics Puente Genil que roza la impotencia acabó arañando un punto (1-1) contra la Unión Deportiva Los Barrios. El conjunto del Campo de Gibraltar – dirigido por el cordobés Rafael Escobar – inauguró con justicia el marcador en el intermedio de la primera mitad, la cual apuró el onubense Ordóñez para ajustar el tanteo. El equipo local contó con Salva Vegas tras el intermedio por Adri, cuya salida del terreno de juego dejó un hueco en la medular que supuso una oportunidad importante para los visitantes de adueñarse de la parcela ancha sin concretar en la vanguardia.

Los once elegidos por Puentenueva respondían, a criterio técnico, a su aviso en la previa de que jugarían los más aptos. Textualmente dijo “los más fuertes”. En cada una de las líneas hubo novedades con respecto a la última alineaciónÁlvaro Vela en portería, Joseca en el lateral izquierdo, Álvaro Pérez por el sancionado Alejo, Toni García, Ismael y Luque como punta de lanza – y su primer cometido era asentarse sobre el terreno de juego. El joven guardameta cordobés tuvo que atajar en el 7’ un remate de los gualdiverdes, muy compactos y prácticos en el arranque. El Salerm Puente Genil, fiel a su originario futbolístico, se aplicó de modo que basó en el juego directo y en las segundas acciones para inquietar al bloque de Rafael Escobar.

La previsible iniciativa de los rojinegros se topó con el orden táctico de los girasoles del Campo de Gibraltar, que volvieron a testear la concentración bajo palos de Álvaro Vela en el 19’ tras un remate de cabeza directo a las manos del ex canterano del Córdoba y Numancia. Toni García dejó su peligrosa impronta con un lejano disparo que frenó David Zamora en pleno ecuador del primer acto. Fue la primera llegada local al área rival. Sin embargo, un centro de Almenara al acreditarse como el más listo en medio de un barullo lo puso en la zona de castigo local. El balón lo remató Sergio Iglesias al fondo de la red para adelantar al tren de alta velocidad visitante. La voluntad del cuadro anfitrión, lejos de apagarse, se mantuvo en un Luque que seguía en la sala de espera del gol.

La llave para abrir esa puerta cerrada a cal y canto la tenía Toni García. El omnipresente centrocampista astigitano llegó a destiempo a un cabezazo en plancha. Los rojinegros, con él en el verde, tienen un líder que carga con el peso de la mochila grupal para tirar del carro. Esas tareas tenían en el onubense Ordóñez al “Sancho Panza” para arrastrar el cuero desde el campo propio en intentos de contragolpe neutralizados por los disciplinados pupilos de Escobar. Luque tuvo la igualada en un mano a mano con el cancerbero barreño y en una posterior contra. Pero la determinación ofensiva de los pontanos estaba en las botas del ‘7’. Ordóñez marcó a puerta vacía y con el alma el ansiado tanto del empate tras una maravilla del renacido Ismael en la asistencia previa.

El ‘killer’ Javi Forján –pichichi del grupo X con 15 dianas- y el mariscal Edu Chía apuraron el reloj llevando el peligro a ambas áreas. Tras los minutos de reposo, Salva Vegas ingresó en el terreno de juego por un trabajador Adri. Del 4-2-3-1 al 4-1-4-1 con Yona Ruiz como único enlace entre la retaguardia rojinegra y el generador de la zona de tres cuartos de cancha. El malagueño mostró en el primer balón que tocó y con metros su carné de identidad mientras la grada pedía a gritos la entrada de un Maero aclamado por la hinchada tras dos meses ausente de las convocatorias. Mientras, en silencio, Manolo Cano logró acabar el encuentro tras recibir un pisotón en el tobillo que casi le obliga a salir del campo de forma precipitada.

La maraña de jugadores gualdiverdes optó por rezagarse al límite de la trinchera dado el empuje de los pontanos. Toni merodeó la portería rival ejecutando un libre directo a las manos de Zamora. Acto seguido, un saque de esquina agitó los corazones por un balón horizontal que sobrevoló el área sin rematador alguno. El encuentro requería de jugadores capacitados para marcar la diferencia y Puentenueva creyó en Maero para despejar el nubarrón realizador. Pudo desatarse la tormenta tras una recuperación de Cano, que abrió al carril diestro donde apareció Ordóñez para poner un centro al segundo palo huérfano de finalizador.

Después de un serio aviso del pontanés Joseca al área rival, Rafael Escobar cambiaba piezas en una UD Los Barrios a la que le valía el empate para alargar hasta las veinte jornadas su idilio con los resultados positivos. Álvaro Vela desplegó un pie izquierdo milagroso para evitar el 1-2 en una clara advertencia de asaltar el Polinario que volvió a requerir de la aparición del pie derecho del enorme portero del Salerm Puente Genil al igual que sus manoplas para detener un buen golpeo de Alan.

Sufría demasiado el equipo local, empeñado en los envíos largos para buscar el 2-1 mientras las huestes barreñas rozaban con la punta de los dedos el botón “alarma”. Y lo hacían hasta permitiéndose el lujo de perdonar ante el marco rival. Dos puntos de doce posibles en lo que va de segunda vuelta y la sed de victoria se prolonga para los insatisfechos con la serie de empates.

SALERM COSMETICS PUENTE GENIL 1–1 UD LOS BARRIOS

SALERM COSMETICS PUENTE GENIL: Álvaro Vela, Manolo Cano, Joseca, Edu Chía, Yona Ruiz, Álvaro Pérez, Ordóñez, Adri (Salva Vegas, 46’), Luque (Maero, 65’), Ismael (Nacho, 78’), Toni García.

UD LOS BARRIOS: David Zamora, Sergio Iglesias (Jordán, 74’), Vázquez, Paco Borrego, Bonaque, Manzano (Dani Hedrera, 69’), Almenara, Mario, Goma (Miki, 89’), Javi Forján, Alan.

GOLES: 0-1, min. 24: Sergio Iglesias. 1-1, min. 41: Ordóñez.

ÁRBITRO: Gamero Castro, de Sevilla. Amonestó por los locales a Salva Vegas y a Toni García; y por los visitantes a Almenara, Paco Borrego y Miki.

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la jornada número 25 en el grupo X de Tercera División, disputado en el Estadio Manuel Polinario “Poli” de Puente Genil (Córdoba) ante unos espectadores. 700 espectadores.