Remontada in extremis que supone la primera victoria blanquiverde (2-1)

Córdoba CF: Becerra, Jesús Álvaro, Chus Herrero, De las Cuevas, Juanto Ortuño, Ángel M, Fernández, Escobar, Imanol G., Javi Flores y Sebas Moyano. Banquillo: Edu Frías, Victor Ruiz, Zelu, Owusu, Raúl Cámara, Moyano y Vera.

Recreativo Granada: Unai, A. López, Fran Serrano, Héctor, Viedma, Rubén, Caio, Sebban, Montoro, Isma y Mario. Banquillo: Rivas, Yael, Rui Pedro, Aranda, Pepe, Espinola y Arnau. 

El ambiente cargado a las puertas de El Arcángel pasó a transformarse en aliento de entusiasmo cordobesista dentro del estadio para animar al nuevo cuadro blanquiverde en su andadura por volver al fútbol profesional.

Nada más dar comienzo el encuentro, Rubén Sánchez anotaba el primer tanto gracias a un pase de la muerte de Montoro desde banda izquierda. Era el peor inicio posible. A pesar de ello, los de Enrique Martín buscaron calmar el partido, aunque sus lagunas en defensa dejaban dudas en el juego. 

Los saques de esquina parecían el mejor medio para crear peligro pues, Fidel Escobar primero y Juanto Ortuño después, rematarían dos centros al área que salieron rozando el palo de la portería rival. Al primer cuarto de hora del partido, Juanto Ortuño tendría una nueva ocasión tras un disparo de volea que se marchó alto. 

El Córdoba jugaba bien, pero el rival estaba encerrado en su campo. Sin embargo, en el minuto 21, Javi flores empataría el encuentro tras una jugada combinativa perfecta que finalizó con un centro desde la derecha de Fernández para que el centrocampista lo controlara dentro del área y no fallase batiendo al guardameta Unai. 

Los locales habían logrado igualar el marcador y, pocos minutos después, el guardameta nazarí se estiró y detuvo el disparo a la escuadra de De Las Cuevas desde la falta frontal. 

El partido se relajó y el cuadro de David Tenorio intentaba penetrar en la defensa blanquiverde con jugadas individuales. Mientras tanto, los locales llegaban con peligro pero no lograban disparos certeros. Con todo esto, finalizaba la primera mitad. Dominio cordobesista y falta de efectividad arriba que no permitía a los de Enrique Martín partir hacia vestuarios con ventaja en el marcador. 

La segunda mitad daba inicio con polémica después de que el colegiado anulara un tanto a Juanto por posición antirreglamentaria. Justo después, la tenía Viedma al rematar de volea y rozar el travesaño de la portería cordobesa. El Córdoba se relajaba y los nazaríes atacaban constantemente. 

En el 67', Jesús Álvaro sustituiría a Raúl Cámara y poco después, el delantero Owusu entraría por Sebas Moyano. Tras los cambios, al filial del Granada le anularían un gol polémico por fuera de juego. Se marchaba un De Las Cuevas al que la batuta se le había gastado y su lugar lo ocupaba Antonio Moyano. Primer balón que tocaba el canterano y si disparo lejano a la escuadra obligó al portero rival a estirarse al máximo para rechazarlo. 

Pasaban los minutos sin ocasiones, solo con acercamientos. Un cabezazo a las manos de Unai en el 88' llegó a ser lo más peligroso de los últimos diez minutos. A pesar del bloqueo futbolístico, en el tiempo de descuento, Ortuño aguantaría el esférico en el área visitante y sería derribado. La pena máxima la lanzaba el propio delantero. El disparo raso a la izquierda del portero significaría el 2-1 para el Córdoba y el éxtasis cordobesista. Con esta remontada, el Córdoba certificaba su primera victoria en la categoría de bronce y la suma de sus tres primeros puntos de la temporada en un encuentro irregular donde el Recreativo Granada pudo haber hecho más daño a la familia blanquiverde, pero que la calidad supuso el detonante para la victoria local.